
Muchos esperábamos esta cinta con creces, prometía y en su momento cuando se anunció fue toda una revelación y más porque las cintas en las cuales sale todo este argumento, los cuales son El Elegido y la sorpresa de hace tiempo Fragmentado, daba para una historia compleja y con vueltas de tuerca en su trama. No obstante los resultados son otros.
Glass nos lleva a los hechos presentes donde la Bestia sigue matando gente, y el personaje de Bruce Willis se ha convertido en un vengador anónimo. Sin embargo la mayor parte de la trama colisiona en un hospital psiquiátrico, (nada que no sepamos del trailer) y dando pie a la lucha interna que cada uno de estos personajes tendrá para superar sus propias limitantes.
Conocemos el estilo del director y sabemos que sus historias no son tipo Superman, pero si son cintas con grandes momentos de sorpresa, anormalidad y rareza… Sin embargo en esta ocasión falla con creces debido a que el filme tarde en arrancar, es interesante como se dan los acontecimientos pero todo queda en una promesa de que las cosas subirán de nivel, lo cual nunca pasa.
Uno de los grandes problemas y sorprende viniendo del director, es que en esta ocasión ninguno de los personajes principales brilla, parecen todos cansados y ya muy vistos, lo cual es una pena, porque el argumento es bueno y la premisa de la historia de verdad se antojaba para dar giros de tuerca y posiblemente secuelas de todo esto.
Más bien pareciera que hicieron la película por sacar unos cuantos billetes extra. Repito es interesante la historia pero cuando las luces se encienden uno sale con la convicción de que pudo ser mucho, pero mucha mejor.
Las actuaciones de todo el elenco están muy bien, es lo que hace que esto no se vaya por un hoyo, sin embargo, cuestiones como la “batalla final” son lo que dan al traste. Como lo dije anteriormente no es Superman, pero por lo que hemos visto en el Protegido y Fragmentado, la secuencia final de esta producción esta muy pero muy desangelado e incluso sosa.
Glass es algo que no terminó por cuajar y pareciera que su director ya dio el viejazo y ha abandonado ese impetú que lo caracteriza y nos conquistó en su momento.
2 respuestas a «Glass… Se Quiebra»