

La historia cuenta como un joven quien nació en el seno de un matrimonio gay, tiene como proyecto escolar, contar la historia de su familia, sin embargo conforme el proyecto vaya avanzando, el feliz matrimonio de cuento de hadas, entrará en crisis, poniendo en jaque todo lo que esté joven creía saber hasta ese momento.
El hilo invisible es una propuesta italiana que aborda con humor y sátira a las nuevas familias, aquellas que son conformadas por padres del mismo sexo, pero que aquí, dista de ser un cliché, sino confrontarse a la realidad de la situación donde los padres al fin y al cabo también cometen errores, sin importar la orientación sexual.

Por un lado es refrescante ver nuevas perspectivas en otras latitudes del planeta y como lidian con ellas. Cabe destacar que parte del triunfo de la película es a su ensamble actoral, que sin ser nada del otro mundo, logra tener la química entre sus integrantes, así como la intensidad que requieren varias secuencias, aunque siendo italianos, la intensidad es parte de su día a día (risas).
Es una película visualmente sencilla pero contiene los momentos perfectos, para que no decaiga el interés, con una óptica diferente a lo que se espera de este tipo de materiales. Trata de enfocarse en el grupo de adolescentes lo cual siento que podría lograrlo, pues el protagonista lucha con los demonios de su edad, así como el amor, la escuela y otras tantas cosas que pasan por la cabeza en aquellos años.

Lo que ayuda a que sea un éxito la producción es que desde un inicio no hay nada que explicar, las historias se dan por hecho como cualquier otra familia en cualquier otra ciudad del planeta, no trata de centrarse en la homosexualidad del matrimonio sino en las confrontaciones que existen en las parejas y como suelen empujar a los jóvenes junto con ellos. No busca convencer sobre los matrimonios del mismo sexo, no vienen a pedir permiso, es algo que pasa guste o no y es una realidad.
El hilo invisible es una buena propuesta, viene aportar nuevas luces al género LGBTTQI, y visibilizar aquellas familias que durante décadas han sido ignoradas por no ser como el resto.
Una buena opción y más con el mes del orgullo en puerta, listo a celebrarse otro años más.