

En 1948, el senador y escritor Pablo Neruda acusa al gobierno chileno de traicionar a los comunistas en el congreso como resultado se da una orden de su captura. El poeta emprende la huida del país junto a su mujer. Mientras es perseguido por un policía algo peculiar, Neruda comienza a escribir «Canto general» y se convierte en símbolo de la libertad y leyenda literaria.
Aunque muchos podrían pensar que esta cinta es una biopic, es más bien una especie de ensueño, un sueño Nerudiano, en el cual entramos a la mente y corazón del escritor en este episodio de su vida tan convulso pero a la vez tan celebrado.
La historia esta estructurada al estilo Atrápame si puedes, donde vemos como quién huye, le lleva la ventaja al policía lento y burocrático. Esta estructura hace que la historia se parta en dos, entre el mismo Neruda y los bellos paisajes en los cuales transita y por otro lado el policía “malo”, que tarde que temprano nos hace dudar si realmente no fue una invención de la misma mente voraz del escritor.

La cinta visualmente tiene el sello del director Pablo Larraín (Jackie, Spencer) y lo que busca con esta historia es acrecentar el mito del escritor, hacerlo tan grande como una especie de ser que realmente moldea al mundo y a la gente que lo rodea a su placer. Esto no es malo, de hecho le da un toque bastante bohemio al filme.
Sin embargo un punto flaco es que no se profundiza en las relaciones que tiene Neruda con otras personas que se entiende, son parte fundamental de su huida. Por ejemplo el chico “guardaespaldas” da igual cuando renuncia a la causa, pues ha sido su paso en la historia tan gris que no importa. O peor aún, el mismo Policia interpretado por Gael García Bernal, es al final de cuentas su némesis por así decirlo y sin embargo le falta propósito.
Es un personaje de papel que no logra concretarse y el resultado es que la persecución columna vertebral de la historia, jamás se siente como si hubiera tal o que hubiera una premura o que al final tendría un desenlace fatal, es algo más bien de ocasión.

En el caso del elenco Gael García Bernal cumple, sin ser algo extraordinario, eso sí que bien le sale el acento. Y por otro lado esta Luis Gnecco interpretando al escritor, haciendo un papel digno.
La película en términos generales es buena, entretenida y con una belleza particular, una ventana al mundo de Pablo Neruda.