El Principito … Lo Esencial Es Invisible Para Los Ojos

Llevar una nueva adaptación de uno de los libros más famosos, entrañables y memorables de la historia, esta difícil y aunado  a eso, el quererlo “revitalizar” para las nuevas generaciones aun más. Sin embargo hay que quitarse el sombrero por este gran trabajo no solo narrativo sino visual.

En esta cinta, el cuento de Él Principito es el hilo conductor de la historia sobre una niña que tiene su vida controlada por su madre y que no conoce la diversión ni el libre albedrío. La obsesión porque los niños de hoy estén preparados lo más pronto posible para el ámbito laboral a costa de robarles su infancia es el mensaje de la cinta.

Visualmente es muy bella la producción, en parte porque juega con dos tipo de animaciones, mezclando de forma correcta y simple, una sutileza a tal grado que nos sumergimos en el mundo del Principito.

Por otro lado la producción tiene varios cometidos, el primero es hacer un llamado a los adultos, cuestionando su forma de vivir la vida y llamándolos a recordar todos esos sueños que dejaron colgados en pos de un trabajo remunerado.

También el llamado es igual de importante para los jóvenes, preguntándose donde queda la curiosidad, la imaginación y sobre todo la libertad. Les trae una historia sobre la juventud y la vejez, la amistad, el amor  y el aprecio a uno mismo, un llamado a recordar quienes somos.

El filme es muy emotivo, al principio tarda en tomar ritmo, pero cuando las primeros párrafos del cuento hacen presencia, es como si tomáramos una estrella y despegaremos fuera de este mundo. Los encargados de esta historia querían crear  algo inolvidable con el mínimo de recursos, fieles a las ilustraciones, pero llenos de sentimientos que lograrán conectar con la audiencia, lo cual gran con creces, siendo cómplices de la aventura y estruja nuestro corazón por la suerte de la niña que sigue los pasos del  Principito.

Este tipo de trabajos son difíciles de reseñar, porque es más lo que te entregan como espectador, que no puedes evaluarlo solo con palabras, es una experiencia que te satisface y te llena por todos estos mensajes que están escondidos en cada una de las palabras que se recitan.

Pocas veces podemos ser testigos de tan buen material, por lo cual es imprescindible ir a las salas, con los más pequeños y los no tan pequeños, pues sin duda alguna, algo de luz de la historia nos tocará y por lo menos un par de horas nos hará recordar que la vida es simple, siempre y cuando uno así lo quiera.