

Lo hemos mencionado sin cansancio cada vez que vemos una cinta de Nicolas Cage, el señor está logrando cosechar películas interesantes en este segundo aire que ha tenido su carrera. Cintas en su mayoría de presupuesto modesto pero que al final nos regalan historias con un toque innovador… Después del Apocalipsis (Apa! traducción que le pusieron en nuestro país – risas) es sin duda una cinta menor pero interesante sobre el mundo después del apocalipsis.
La trama no es nueva, un mundo que ha caído en el caos, debido a que ha sido invadido por unas criaturas raras y asquerosas que nadie sabe nada por el caos, ni de donde vienen o si tienen algún propósito. Nadie sabe si vienen del espacio exterior o si son mutantes, lo cierto es que Nicolas tendrá que sobrevivir para poder ver a sus dos hijos crecer en este mundo en ruina.

Como lo mencione anteriormente la producción es modesta, estamos ante algo parecido a la cinta original Un Lugar en Silencio, donde toda la historia se desarrolla en una pequeña casa/granja que está retirada de las grandes ciudades y que busca sobrevivir noche con noche a los ataques de estas bestias.
Si bien no hay mucho de donde cortar el filme tiene la típica trama sobre monstruos que acechan a esta familia y que tienen que lidiar con las inquietudes de los jóvenes y de un padre que cae en cuenta que no puede defenderlos eternamente, pero aun así desde el primer minuto el director sabe cómo atraparnos para que nuestra atención se quede hasta el final.
No obstante lo que hace muy atractivo son los monstruos en sí, debido a que son unas cosas tan feas y peculiares que retan lo posible. Durante toda el filme no tenemos claro que son, como fue que se originaron o como llegaron y la forma en como esta cosas atacan es verdaderamente espeluznante, es inquietante y se te erizan los pelos de nomas verlos… O por lo menos ver una parte de ellos.

Puedo decir sin temor a equivocarme que la secuencia donde uno de los hijos de Nicolas se queda solo en casa y se queda dormido frente la puerta que está cuidando y la forma tan monstruosa de cómo la bestia mete lo que parece ser un brazo y se va estirando y estirando hasta poder alcanzar al muchacho, fue una de las secuencias que más nos puso los pelos de punta (risas). Sin olvidar que cuando llega el momento de la recta final cuando atacan a las casas y vemos en su plenitud a estos “mutantes” la forma en como “envuelven” a la gente o como los persiguen en una especie de “rueda” hecha por ellos mismos te deja totalmente frekeado.
A pesar de que los efectos especiales son de segunda mano y no están bien pulidos, al ser una historia corta que va y cuenta lo que le interesa, logra su cometido, el de tenernos en tensión por la suerte de esta familia y de quienes lo rodean.

En general la cinta es buena, palomera y aunque predecible, logra hacer que te muerdas las uñas en varias ocasiones por lo asqueroso de estas cosas, dejando los cabos sueltos sobre que fue lo que le paso al mundo después de la secuencia inicial. No hay principio y no hay fin, solo una historia en particular de una familia y las ganas de vivir en lo que alguna vez fue el mundo conocido. Recomendable para verse un domingo de flojera total.
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