Por más que tratamos de no gritar ante las secuelas del mundo de Harry Potter, es imposible con semejantes imágenes.
Hay que reconocer que el estudio y Rowling han sabido usar un pequeño almanaque para partir de ahí y contar historias que en el libro fueron solo cuestión de mención en un par de hojas. Nos emociona ver que hay un poco de más acción y más magia, que de eso se trata la cosa.