Alien Covenant… Al Cinéfilo Lo Que Pida


Originalmente Prometeo tenía la intención de centrarse en un universo expandido de Alien, contar el origen de tan tremenda monstruosidad desde el punto de vista filosófico y de ahí ir hacia donde la historia los llevará. Sin embargo una horda de fans que pedían Aliens y sangre al por mayor y una recepción tibia en taquilla, trunco la idea original, dando como resultado Alien Covenant, un filme que da carpetazo a tal utopía y se entrega de lleno al horror espacial.

Alien Covenant se sitúa años después de la fallida excursión de Prometeo, en esta ocasión una nave colonizadora rumbo a su destino, se topa con una transmisión algo curiosa e inquietante, lo cual hará que la tripulación se dirija a un mundo apto para la vida, pero que a la vez será la muerte para todos ellos.

Esta cinta es una mezcla entre Prometeo y Alien: El Octavo Pasajero, retoma un poco del propósito de las misiones, así como da mayor protagonismo al autómata David. Mientras que por otro lado, retoma la vieja dinámica de Alien, algo así como “Sálvese quien pueda”.

La cinta no tiene desperdicio, es rápida, ahonda poco en el elenco y se centra en explicar los hechos que no veremos del Prometeo. Así también el como da vida a Alien, su metamorfosis y la fiereza con la que caza a sus víctimas.

En cuestiones técnicas y artísticas no hay ningún reparo, se luce al igual que su predecesora. El ritmo del guion es acertado, que junto con el manejo de la cámara logra momentos verdaderamente estresantes y hace que algunos brinquen de sus asientos.

Otro de los puntos a favor del filme es la inclusión del mexicano Damian Bichir, que hace un muy buen papel como el sargento. Así también el resto del elenco esta bien, aunque a mi gusto no resaltan tanto como en el resto de la franquicia.

Lo que si es una verdadera lastima es lo que en un inicio comentaba, el que el director de un plumazo (literal) haya terminado con el sueño de una secuela tal cual de Prometeo, ya que en la anterior cinta, a muchos nos entusiasmaba  el saber que habría una cinta donde su anterior protagonista iría en busca de sus creadores, saber los motivos del porque pensaban destruir a la tierra y sobre todo y más importante, que diablos es esa sustancia oscura, que hace que todo lo que tenga contacto con ella, se convierta en un monstruo. Muy desafortunadamente, al estudio le parecía que algo así sería poco rentable en taquilla y no dieron luz verde al proyecto.

No me mal entiendan, Alien Covenant es un excelente película, de las mejores de la franquicia, pero Prometeo era algo más que una cinta de monstruos. La filosofía en la que estaba inmersa, podía prescindir de tener Aliens en la pantalla, lo cual fue el motivo de la ira de los fans en su momento y parte de su debacle.

En resumen, Alien Covenant es tanto el fin de un idea truncada, el regreso triunfal de una de las criaturas más iconicas del cine y un homenaje tal cual, a la película que originó todo esto y fue protagonizada en su momento por Sigourney Weaver.


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