Pues bien, Depredador ha sido uno de esos personajes, que desde su aparición allá por los muy pero muy lejanos finales de los ochentas, cimbró a la industria del cine por su aspecto y la forma en que iba cazando a sus presas. La franquicia ha tenido sus altas y bajas, y sin ser o más bien nunca fue un personaje tan masificado, sin embargo ahora con Disney homogeneizando todo lo que toca, para que todas las películas sin importar el universo, se vean, se escuchen y se estructuren de la misma manera, le ha tocado el turno a este cazador, convirtiéndolo obviamente en una historia más que desde ya se nota el rugido de tripas por hacer dinero fácil aunque sea esta “otra tonta película de adolescentes “ (risas).
La historia nos cuenta cómo un joven depredador en su mundo tiene que probar su valía para ganarse un lugar en su grupo, de no hacerlo será aniquilado por su propia familia. Sin embargo y tras recibir una segunda oportunidad en un momento fortuito, decide viajar a un planeta donde se encuentra una de las peores criaturas que existen en el universo y con ello regresar a su lugar de origen para dejar en claro que él es un depredador.
De entrada suena bien la historia y sinceramente pintaba bien, sin embargo y para sorpresa de muchos la cinta toma el camino que han tomado todas las historias de Disney, personajes que quieren ser graciosos y aspectos como le dicen hoy los jóvenes, ondas muy “woke”.
El tema aquí es que parece que estás viendo una mezcolanza entre King Kong Isla Calavera, Guardianes de la Galaxia 2, y Avatar, … Ah! Y el Mago de OZ (risas) dejando de lado toda esa onda mercenaria y bélica que tenía las cintas originales de Depredador, cambiándolo por un “adolescente” alienígena que llora y llora la pérdida de su familiar y su trauma de no pertenecer y ser lo suficiente para su clan. Y bueno, una vez llegado a este planeta extraño uno mira y piensa se pondrán buenos los moquetazos, y la verdad pos más menos, pues se sacan una serie de criaturas que más que ser ficción parece fantasía.
Para acabarla de amolar llega la parte entre Guardianes de la Galaxia y el Mago de OZ (más risas) pues ahora resulta que esta depredador que era todo dolor y muerte, se hace de una serie de acompañantes así como los Guardianes, así cada uno muy a su manera y ahí los ves paseándose cual caminantes en el camino amarillo en busca del gran mago (mega risas).
Y bueno hay villanos que son exactamente lo mismo que en la pésima TRON ARES, que por cierto me faltó decir que también se parece a esta, pues al final son dos personas que tiene un “despertar” tienen crisis disque existenciales, (hazme tú el favor- ¡¡¡Alexa!!! Ven rápido ) y van en contra del sistema o de las figuras de autoridad. En ambas películas los villanos son unas terribles corporaciones, liderados por gente loca y desalmada… Osea we, tan HO-MO-GE-NE-I-ZA-DA está la cosa que se ve que los guiones son iguales solo cambian el bendito nombre y cara y listo una película más.
Puedo decir que me esperaba mucho más de depredador y mucho más de la malvada corporación, y cuando las cosas se empieza a poner buena, es cuando llega la parte de Avatar, casi casi el bendito depredador se pone a meditar y decir “todos somos uno” con la gran bestia … Neta se nota que Disney quiere sacar peluches de todos los personajes por eso los hace más … mmm ¿como se dice ahora cuando quieres vender algo a las personas hasta por la taza del baño? ¡Ah sí!, … ahora son más “humanos” , háganme el favor.
Si no han visto nada de depredador seguro les encantará, pero si alguna vez pensaste que regresaría esa gloria del depredador ochentero, temo decirte que lástima, esta cinta esta dirigida a las nuevas generaciones muy digitalizadas por la casa Disney y que busca obviamente como objetivo es expandir el universo y así sacar series de otras historias como es el caso de Star Wars.
No todo es tan malo en la película, tiene buenos efectos , pero eso no basta para dar por perdido a este Cazador que ha sido cazado por un ratón
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