El Conjuro 4: Últimos Ritos… En Las Buenas Y En Las Malas 



Pues llegó el último capítulo de este célebre matrimonio caza demonios, ósea los Warren, y cierran con un episodio entre la nostalgia y la continuidad. Nos queda claro que El Conjuro se ha convertido en una de las franquicias de terror más celebres de los últimos tiempos y las expectativas estaban por las nubes, sobre si este último capítulo nos mandaría a los mismísimos infiernos…


La trama es la misma que las demás, tienen que lidiar con algo que asecha a una familia en una casa cualquiera, obviamente este caso será el que haga que se jubilen de por vida, y es por eso que las entidades de este filme generan expectativa para ver si serán las más terroríficas de toda la saga.

Siendo sinceros y las cosas como son, el Conjuro 4 no supera a la primera cinta, y se siente una copia exacta que lleva prisa por contarse. En parte porque algo de la película se enfoca en hacer énfasis en la familia Warren, el cariño que se tienen entre ellos y como la familia es fundamental para lo que vendrá en un futuro.

La cinta deambula entre una alegoría al tradicionalismo y lo demoníaco, un fuerte guiño a las “buenas costumbres”, lo cual no es malo, simplemente sorprende como cierran con un final digno de un cuento de hadas.

Fuero de eso la cinta arranca bien, a pesar de ser lo mismo de siempre, tiene muy buenos momentos que hacen que el publico de unos brincos de las butacas, como cuando se cae la lámpara cuando la familia está cenando o cuando alguien arroja cosas feas desde la garganta.

No obstante sin duda alguna creo que el momento que de plano nos erizó los pelos fue cuando una de los integrantes de la familia, ve en cámara lenta la grabación de su cumpleaños, ósea ese momento y posterior a lo que se ve en la pantalla y esas “luces” (sorry no puedo contar trama) fue desde mi punto de visto uno de los momentos más alucinantes de toda la película.

En términos de actuación, todo mundo está muy bien obviamente Vera Farmiga y Patrick Wilson alias el Sr Marlboro (risas) logran darnos una muy buena interpretación. No cabe duda que la química que hacen en pantalla es realmente uno de los pilares clave por lo cual estas cintas han funcionado. La mancuerna que hacen juntos es lo que ha destacado al Conjuro de otras cintas de terror del montón .

No obstante y a pesar de tener todos estos elementos a su favor, lo cierto es que esta última parte no cumple con las expectativas, es decir, es buena, entretiene pero para ser el cierre se queda algo corta. De igual manera no logra superar a El Conjuro original y bueno es un buen episodio para esta saga pero es lamentable que no haya sido algo más emocionante en lugar de nostálgico.

La trama daba indicios de que pasarían cosas agobiantes como la salud del Sr Marlboro, pero a la mera hora, solo fue una anécdota y nada clave para el desenlace. Y qué decir de las entidades malignas, a momentos daban miedo pero conforme se va avanzando la trama pierda total fuerza y deja de impresionar y dejan de ser memorables.

En lo personal algo que no me gustó es que el espejo maldito, si bien, si da para ser algo tétrico como que le faltó claridad  sobre qué o quién estaba ahí rondando y se hubiera visto mejor si la posesión hubiera tenido algo más de protagonismo, como en la escena donde el cura va con el chisme a las oficinas de la iglesia. Pero nos dejan con muchas incógnitas que hacen que no termine de ser contunden que es lo que están enfrentando ni la gravedad del asunto. Repito no es mala película, solo que uno se queda con las ganas de que pudo ser mejor.

En resumen El Conjuro 4: Últimos Ritos es un cierre decoroso y que hace alusión a los años dorados del sueño estadounidense, donde la gente podía conseguir aquello con lo que soñaba y donde los valores tradicionales guiaban a las personas… Aunque no espantaran a ninguna mosca con eso (risas).

Vale la pena verla solo para decirles adiós a los Warren.


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