Drácula: Una Historia de Amor… AMOR GÓ-TI-CO

Increíblemente esta cinta filmada por Luc Besson, no ha tenido la promoción que debería y a pesar de que se mantiene en carteleras, no ha conseguido una corrida comercial realmente como merece. Al parecer, existe una percepción de que es una copia y calca del filme de antaño de la versión Francis Ford Coppola, pero oh! sorpresa, resulta ser que es literalmente una de historia de amor gótica desde el punto de vista del monstruo que desafió a Dios.

La historia evidentemente toma el relato de Bram Stoker y por eso es la misma que la de Coppola, sin embargo mientras en la cinta de antaño somos testigos de cómo este ser maligno trata de destruir el tórrido romance que había entre Keanu Reeves y Winona Ryder, aquí conocemos el origen extendido de este mito, del momento en que uno de los guerreros más sanguinarios de Transilvania decidió negar a su Dios mientras vivía eternamente afligido por la amada que perdió.

Ojo! Esto no es un Crepúsculo, sino es una historia de amor y una búsqueda incansable que pasa mientras los acontecimientos que todos conocemos de la historia de Stoker llegan. La forma en cómo este hombre deambulo por el mundo, buscando, aniquilando, destruyendo a todo lo que había a su alrededor es lo que vemos, no la historia del abogado y su amada como pasa en la historia original.

Aquí vemos un personaje que está rodeado de seres extraños y un castillo sacado de una pesadilla que transita el tiempo hasta que llegue el momento de encontrar a su amada. Evidentemente cuando la historia original toca la llegada del abogado al castillo de Drácula, es ahí donde colisionan ambas historias y fluyen en paralelo. La trama ya conocida por todos y esta versión donde Drácula hace uso de su perversión para reunirse con su amada.

Hay que tener en cuenta que aquí hay algunos elementos del vampirismo que se omiten, ya que buscan retratar a un hombre maldito y no un ser fantástico de ultratumba. No obstante hay una secuencia que sin duda alguna fue profana, blasfema y desde mi punto de vista es el momento que desata la locura del  filme, y es cuando este ser necesita rejuvenecer y la única forma es con litros y litros de sangre, por lo cual asiste a un lugar, que más que el lugar, la forma en como llama al deseo y la perversión y se sueltan para fundirse en uno solo, es una maldita locura dicha escena. Si en algún momento pensé que esta película no tenía nada nuevo que aportar, pues oh! sorpresa, con poco hace un chingo (risas).

Por ser una producción europea evidentemente los apartados artísticos como el vestuario, las locaciones, y la música son una exquisitez, pues los europeos se pintan solos para contar sus mitos. La secuencia de los bailes en las grandes cortes europeas son un sueño.

Queda claro que a pesar de ser una historia ya contada, esta versión tiene mucho de donde cortar y cosas nuevas que mostrar. No lleva prisa para ser una historia de terror y acción, sino es claramente una película GÓ-TI-CA.

Drácula: Una Historia de Amor, entrega a su publico lo que promete, una historia de amor, y quedé gratamente sorprendido por el despliegue a nivel actoral de todo el elenco, así como el nivel de producción que nos entregan, lo cual como comente en un principio, me sorprende que no tenga la promoción que debería, pues es un filme de altos vuelos.

Si eres fans de lo gótico, del vampirismo y todo lo relacionado, obviamente es obligado a verse este filme y si no lo eres y aún está en cartelera esta cinta en tu ciudad no dudes en verla.