

Pues bien, hace mucho pero mucho tiempo atrás en una tierra muy muy lejana existió un joven llamado Danny Boyle, y en aquella época de su vida con esas ganas de revolucionar el cine, rodó la cinta 28 Días Después que para no quitarnos esa bendita costumbre de cambiarle el nombre a todo, aquí se llamó Exterminio, ósea ¿neta? ¡¿quien carajos se encarga de estas traducciones!?… El chiste es que Boyle le dio la vuelta a la tortilla en el género zombie, un filme que fue un hito en su momento, algo nuevo y fresco que se convirtió en un clásico y 23 años después tenemos esta tercera entrega.
De qué va esta tercera entrega, pues como el título original lo dice, 28 años después de lo sucedido en Reino Unido, somos testigos de cómo esta región del mundo sigue en cuarentena, y sus sobrevivientes siguen luchando para sobrevivir a lo que queda, en una tierra donde los Zombies algunos han evolucionado en formas más temibles e inteligentes y otros en formas más involucionadas, mientras un joven y su madre buscan cruzar la región para ir tras un excéntrico doctor que solo él puede ayudarlos.

De entrada la película pinta bien, conserva la estética y el espíritu en muchas maneras del filme original, la forma en como nos explican de como Inglaterra quedó aislada del mundo es un tema interesante y conforme van apareciendo los Zombies va pintando bien la cosa.
Sin embargo la trama se estanca o medio estanca cuando toda la historia recae en el joven protagonista y su madre, pues para ser el mundo como es ahora y estos tipos de zombies que son más brutales, es poco creíble que un niño de 12 años y una madre con problemas de salud sobrevivan a las cosas que los acechan, lo cual hace que el filme pierde fuerza.

Y no me malentiendan, pero lo cierto es que Exterminio es un ícono del género zombie y se nota que el paso de los años y la visión del director como es de esperar ha cambiado, la nostalgia, el paso del tiempo, la familia, todos esos eventos de vida hacen que las perspectivas cambian y ahora tengamos una película que después de la mitad empieza a tomar un rumbo más intimista y humano. Te das cuenta porque cuando llega la hora de conocer al Doctor, más allá de sangre y tripas volando, aquí tenemos lágrimas y arrepentimientos, es un Danny Boyle que reflexiona sobre la vida, la muerte y es claro como el concepto de la Muerte en el Día de Muertos en México ha influenciado para la visión que el mundo tiene ahora sobre este tema.

No es mala la película, simplemente es algo más tranquilo que se va por otro camino a lo que muchísima gente esperaba. No supera a 28 Días Después (cinta original) eso es claro y puede que mucha gente sobre todo los más jóvenes salgan algo decepcionados. Pero para quienes les guste materiales a la Last Of US y las últimas temporadas de Walking Dead, donde de vez en cuando salía un monstruo y lo demás era “alto contenido humano” (risas), seguro esta tercera entrega les será de su agrado.
Mención honorífica a los “88 Locos” (risas) de la secuencia final, (muchas más risas) algo muy pero muy inglés y que nos recuerda mucho al look de Naranja Mecánica, que nos dejan entre ver que esta historia continuará en 28 Years Later: The Bone Temple, título de lo que veremos en 2026.
Descubre más desde Cinembrollos
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
