Hay quienes han criticado esta cinta por lo mismo de que es animada y por la animación en si y como no, pues no es cualquier cosa es EL SEÑOR DE LOS ANILLOS, sin embargo lo que alguna gente no ha captado, es que la animación para esta entrega es una animación tradicional, a la Old School. En un mundo digital como en el que vivimos actualmente, obras como La Guerra De Los Rohirrim son un intento por rescatar aquella vieja animación donde la fluidez no era lo primordial sino el trazo y las ganas de llevarnos a un mundo que pocos podían retratar en la vida real… Es una mirada a la niñez sin duda alguna.
Situada 183 años antes de los eventos narrados en la trilogía original de películas, “El Señor de los Anillos: La Guerra de los Rohirrim” cuenta el destino de la Casa de Helm Hammerhand, el legendario Rey de Rohan. Un ataque repentino de Wulf, un astuto y despiadado señor Dunlending que busca vengar la muerte de su padre, obliga a Helm y a su pueblo a hacer una última y atrevida defensa en la antigua fortaleza de Hornburg. Encontrándose en una situación cada vez más desesperada, Héra, la hija de Helm, debe encontrar la voluntad para liderar la resistencia contra un enemigo mortal que pretende su total destrucción.
Hay que admitir que de entrada te saca de onda ver una cinta de El Señor de los Anillos con sus tintes épicos dibujados a lápiz y con un aire a los animes de antaño. Sin embargo una vez te adaptas al estilo de quienes crearon este filme, puedes sumergirte nuevamente en la belleza de la Tierra Media.
El filme tiene momentos verdaderamente épicos que te emocionan hasta el tuétano como son la muerte de Helm, las batallas que se van desarrollando en el transcurso o el destino de los hijos de Helm, esos si son verdaderos dramones. De igual forma tiene referencias que emocionan a los fans, desde la aparición de Saruman, los orcos y la mención de los anillos y el dejo de mención a Gandalf, son escenas que si bien duran un suspiro, logran hacer el día a toda la comunidad.
Un punto no tan brillante de la producción es la banda sonora, ya las películas de El Señor de los Anillos nos han acostumbrado a un soundtrack robusto y hasta cierto punto místico, sin embargo aquí en esta cinta es mínimo lo que nos entregan y sin tanto esplendor como en otras cintas lo cual es algo lamentable.
La dirección es buena y la historia en general sorprende, pues de entrada la historia se siente algo predecible y podría decirse plana, pero conforme van pasando los minutos y las secuencias, nos damos cuenta que las cosas se van complicando y volviendo lo que parecía una aventura pasajera, a conocer todo un mito que tiene que ver con la muerte del rey de esta comunidad.
No es la gran obra de el Señor de los Anillos pero si es un gran episodio previo a la trilogía que todos conocemos, incluso me atrevería a decir que esta cinta, es muchos más emocionante, épica y trascendente que lo hecho por la serie de Amazon.
Por lo cual para los amantes de esta saga, El Señor De Los Anillos: La Guerra De Los Rohirrim es sin duda un gran regalo para esta temporada invernal, de fin de año y de este nuevo año que recién comienza.
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