Melodrama de como el guionista Michael Ausiello se embarca en una montaña rusa de emociones cuando a su pareja le diagnostican un cáncer terminal, mientras va recordando como fue que todo comenzó, una noche cualquiera, en una ciudad cualquiera.
¡Uy! y ya entrados en gastos con el espíritu de las navidades pasadas, presentes y futuras (risas), nos chutamos este filme, ambientado en parte en la época navideña. En un principio pensé que sería una de esas cintas bobas, frívolas sobre dos hombres que no crecen y cuando llega el final, aun así todo es magia y diversión. Pero no, fue todo en una dirección totalmente muy diferente lo cual se agradece.
Protagonizada por Sheldon digo, Mr Cooper, digo Jim Parsons y Ben Albridge, somos testigos de este romance tan raro como único que conforme camina se va transformando en muchas cosas, así como el desgaste sobre si mismo. En lo personal creo que ambos actores resuelven muy bien las escenas en las que se encuentran juntos, se siente una química, pero no es una química “bonita”, sino el de dos personas que inexplicablemente quedaron atrapadas en algo llamado amor.
Un punto flaco que tiene el filme desde mi perspectiva, es que los años intermedios pasan muy pero muy rápidos, cosa de segundos, y se entiende que el director quiso centrarse en el inicio y evidentemente en el final tortuoso, pero aun así siento que el haberse brincado tantos años y no darnos algo un poco más sustancioso, le quita peso al melodrama.
Por otro lado, algo que aplaudo es que no es una cinta con estereotipos, y se vale al final de cuentas, pero personalmente ya esta uno cansado de estereotipos, o por lo menos el personaje de Parsons es algo que no se ve tan seguido.
La producción es sencilla, es un ensamble actoral pequeño, con mi amada Sally Field como la suegra la cual la amamos, y a pesar de ser una producción discreta es contundente con lo que transmite. Si, lo se, es al final una cinta aspiracional en muchos sentidos, pero me gusta que no caiga en tanto optimismo ni oropel.
Spoiler Alert es a mi parecer un muy buen melodrama que habla de lo más mundano y eterno que puede existir, las relaciones, así como el compromiso y el amor, no necesariamente siempre vence los obstáculos, sino hacerles frente hasta perder la lucha.
Una excelente opción para esta temporada invernal y de lluvias discretas por la ciudad, mientras se pasa uno el día acostado.
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