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Hay casos donde un viejo filme es traído a nuestros días, se revitaliza y queda como nuevo. En otras ocasiones por alguna extraña razón, la actualización del clásico parece que no fue la adecuada y hace que se extrañe a su original.
Robocop es un remake fallido, es tanto su afán por rejuvenecer, por verse actual, que traiciona por mucho a la esencia del filme y da como resultado una historia que no tiene nada que ver con lo que fue la original.
En si la película no es mala, sin embargo su falla esta en que Robocop se vuelve una maquina violenta a diestra y siniestra. Y aunque la historia justifica esta acción, aun así desde el inicio, cuando conocemos al hombre que encarnará a esta maquina, esta lejos de lo que representaba este ciber-policia.

Un caso que tuvo el mismo tratamiento y tuvo el resultado opuesto sin duda fue la reciente cinta de Superman: El Hombre de Acero. Exactamente se tomaron los mismos pasos, para rejuvenecer la franquicia y conectar con los tiempos que vivimos. Sin embargo mientras que en Superman humanizan al héroe, con sus defectos, aquí en Robocop lo deshumanizan a tal grado, que la escena donde muestran lo que quedo de su cuerpo, es bastante incomodo.
Por parte del guión también hay problemas, pues quisieron hacer algo complejo y serio al estilo Dark Knight, sin embargo el tiempo para desarrollar los conflictos es muy corto, los personajes están tocados superficialmente, y el cierre de la historia es incoherente y poco emocionante.
Lo que salva esta película del fracaso son las actuaciones de Samuel L. Jackson, que es soberbia, irónica y roba cámara con sus diálogos. Y por otro lado Gary Oldman como el doctor que crea a Robocop, es un muy buen personaje, bien logrado del actor ingles y que también roba cámara al protagonista.
En síntesis, Robocop el Remake no tendrá una segunda oportunidad, la cinta no es emocionante, al contrario es fría, poco lógica y totalmente traiciona la medula de la historia. Ese Robocop en negro ya es un modelo descontinuado.

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