300: El Nacimiento De Un Imperio… ¡Hombres Al Borde De Un Ataque De Nervios!

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La primera cinta de 300 fue una bocanada de aire fresco, con grandes dosis de acción y sangre que recorrían la pupila y era el éxtasis de la audiencia. Muchos años después llega una secuela que a mi ver es tardía, emulando lo hecho pero no superándolo.

Los hechos se sitúan en paralelo a la pelea de los Espartanos mientras los Griegos hacen su luchita, en barcos de madera,contra las legiones que vienen de lejos. Una de las diferencias es que al ser en mar, se resta cierto virtuosismo a las peleas, pues no son tan dinámica como se quisiera.

La historia es sangrienta, entretenida y tiene un buen argumento, pues en parte conocemos el origen de Xerxes y sus motivos de invadir Grecia. La historia en general tiene un buen ritmo y quienes cargan con los protagónicos logran crear tensión en los momentos adecuados.

Sin embargo se extraña en cierta manera, esa soberbia y espectacularidad que impregnaban la película original. Y como en su momento se ha quemado demasiado las tomas en cámara lenta, en esta ocasión no sorprenden tanto como se quisiera.

La cinta es buena, mantiene la calidad e incluso deja abierto para lo que es una inevitable y monumental tercera parte. Uno sale satisfecho ante el ambiente de homoerotismo que abarca este tipo de producciones (risas) y la sangre embarrada en cada una de las butacas, que mas que ser al natural ha sido un poco mas forzada que nada.

300: El Nacimiento de un Imperio, es una muy buena película, no tienen la genialidad de la primera, pero sirve como un buen puente narrativo para su siguiente entrega.